La inspectora Leonore Asker, al mando de la peculiar Unidad de Casos Perdidos, recibe una llamada del todo inesperada: su padre, con quien no tiene contacto desde hace más de quince años, necesita su ayuda, ya que se ha hallado un cuerpo en su finca y la policía sospecha que él ha sido el asesino.
Mientras, Martin Hill se muda a una finca apartada para escribir una biografía sobre el empresario Gunnar Irving, intrigado por el hecho de que la legendaria propiedad contiene una isla privada con un observatorio astronómico abandonado.
Pronto, Hill descubre que la zona tiene más historias que ofrecer: luces misteriosas y cuerpos mutilados.
Mientras Asker y Hill intentan encontrar respuestas, un temible asesino en serie, el hombre de cristal, surge de las profundidades de la oscuridad de las que nadie regresa jamás.
Segunda entrega de una trilogía que empezó con el Asesino de la montaña. Nos vamos a reencontrar con Leo Asker y Martin Hill que se van a embarcar en un nuevo caso.
La trama se inicia en Malmo cuando dos jóvenes viajan a una isla privada en busca del observatorio de Bernhard Irving donde años atrás uno de los miembros de la familia Irving, Gunnar, asegura que tuvo un encuentro con un ovni. Nadie ha vuelto a ver a ninguno de los jóvenes hasta que aparece el cuerpo de ellos.
Por otra parte ha aparecido un cadáver en la finca del padre de la inspectora Asker y la policía lo considera el principal sospechoso.
Hill es contratado por la familia Irving para escribir la biografía de Gunnar mientras Asker tiene que encontrar la persona que ha matado al fallecido que se ha encontrado en los terrenos de su padre.
Martin se instala en la fina familiar y pronto se dará cuenta que hay más que un secreto que parece esconderse en las entrañas de la propiedad y hay más de una persona que estará dispuesta a hacer lo que sea para que esos secretos no salgan a la luz.
Ambos intentarán hallar las respuestas a sus investigaciones particulares y no sospechan que un asesino en serie acaba de aparecer en busca de una nueva víctima.
Tiene un inicio muy potente a pesar de que es un libro extenso pero tiene una investigación muy buena y muy bien estructurada con mucha tensión e intriga que se sostiene durante toda la narración.
Los personajes son complejos y tiene un cierre decente. En algunos momentos me dio la sensación de que se hacía pesada porque se hace repetitivo y algo predecible pero aún así se deja leer. Con menos páginas hubiera funcionado mejor. Que conste, que esta es una opinión personal.
Retrata lo que está dispuesto a llegar un ser humano por conseguir su propio beneficio y queda claro que para algunos personas eso de cruzar el límite es una frase hecha.
Aunque son casos independientes es recomendable leer la primera entrega para familiarizarte con los personajes principales.
En general me ha gustado y la recomiendo.
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