Unos días antes de Navidad, la familia Hermansson al completo se reúne para celebrar los sesenta y cinco años de Karl-Erik, un padre encomiable y maestro jubilado, y los cuarenta de Ebba, su hija favorita. Unas horas después, se producen dos desapariciones inexplicables: primero, Robert, la oveja negra de la familia; al día siguiente Henrik, el hijo mayor de Ebba, quien desaparece en medio de la noche sin dejar rastro.
Gunnar Barbarotti, un inspector de origen italo-sueco que trabaja en la policía de Kymlinge y que se preparaba para la odiosa perspectiva de una Navidad con su exmujer y sus ex suegros, se hará cargo del caso. Las investigaciones, sin embargo, parecen no avanzar. ¿Existe una conexión entre los dos casos? Obsesionado con encontrar la verdad, hará falta tiempo, perseverancia y la ayuda del destino para que las investigaciones tomen una dirección precisa y dé con el culpable antes de que el caso quede enterrado por el olvido.
Es una novela pausada, con esto quiero decir que no hay que esperar una acción trepidante porque el autor se toma su tiempo para narrar este thriller. Es una historia muy atractiva y entretenida.
Es un thriller que toca la familia, los problemas que hay en ella, la infancia, los secretos, las personalidades dominantes y hay cosas y comportamientos que no son lo que parecen.
A través de ese examen de sus personalidades, a través de sus pensamientos íntimos y de sus experiencias vitales que llegamos a conocer a la familia y la conexión que tienen entre ellos.
A mi me parece que el planteamiento está bien hecho porque no es como el típico desarrollo de la novela policial en el que conocemos lo hechos a través de la investigación.
En la primera parte el autor nos muestra los hechos previos a la desaparición y nos describe las personalidades de los miembros de la familia. Una familia que entre ellos no parece que haya buen "rollo" y que están en esa celebración por obligación. Aquí el lector tiene más información que la policía y eso implica que siempre vayamos un paso por delante de la investigación sobre todo a nivel psicológico de los personajes.
En la segunda parte aparece Barbarotti el inspector designado al caso que resulta ser un policía perseverante pero que nunca tiene toda la información porque los Hermansson ocultan cosas.
Barbarotti intenta resolver el misterio, se vuelve obsesivo y desea saber si hay relación entre las dos desapariciones y va más allá porque se involucra en los conflictos familiares y eso hace que haya giros en la historia.
El autor te envuelve en la trama y consigue atrapar al lector desde el primer momento.
Como ya he comentado arriba este tipo de thriller nórdico es bastante complejo a veces y como pasa con las series nórdicas la acción es pausada no tiene nada que ver con los thrillers ingleses y/o americanos que tienen más ritmo.
Es la segunda novela que leo de este autor, solamente han traducido cuatro al castellano aunque tiene en su haber mas. Espero y deseo que toda su obra llegue al lector español porque es muy buena.
A mi me gustan mucho este tipo de lectura en la que saben mantener la tensión en todo momento y desde luego la recomiendo a los lectores que les guste este género.
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